La primera vez que la vi fingí indiferencia
ensimismada como iba en mis asuntos cotidianos
La siguiente vez presté algo más de atención, genuina
Una anciana escuálida y risueña, afanada en su labor,
aunque vea llegar las 7 de la noche en la misma esquina
El semáforo cambia de rojo a verde en un parpadeo
y ya han pasado un par de semanas desde la primera vez que la vi
Ahora me cuesta seguir mi camino sin llevar a mi lado, intacto,
un ejemplar de El Nacional
para asegurarle 15 pesos más en su cuenta del día
Nunca la recuerdo
a Catalina
Pero al llegar a la esquina de la Abraham Lincoln con Malecón
todos los días, más o menos a la misma hora
no puedo girar a la izquierda sin dedicarle una mueca con intención de sonrisa
y comprarle el periódico
"Lo traje de la oficina", miento al llegar a casa y dejar el papel sobre la mesa
No quiero que sepan quien es esa anciana
cuyo rostro cansado me hace llevar monedas en la billetera
La misma que no desocupa la esquina,
ni siquiera por una insistente llovizna de primavera
Ni un solo día he dejado de verla
Y cada día voy construyendo su historia en mi cabeza
[La de la hija que murió en un accidente;
la de los nietos que cuentan con su labor;
la de una asistencia gubernamental que no acaba de llegar]
Trágico cuento sacado de noticiarios nocturnos en televisión local
Verde
La luz volvió a camiar y yo le doy un último vistazo por mi retrovisor izquierdo
pero ella no tiene idea
ya está ofreciendo la escandalosa primera plana de la tarde a otro conductor
Y este, como yo aquella primera vez,
también finge indiferencia
¡Bienvenidos!
"¡Bienvenido! Me alegra que hayas decidido darte una vuelta por aquí, querido lector, tu visita y tus comentarios son muy importantes para mí, así que siéntete libre de merodear y expresarte a tu gusto. Espero que tu "viaje por mi vida" se desenvuelva sin contratiempos y que al final de la travesía te queden muchas ideas y algo de inspiración, no pido nada más. Mil gracias por adelantado", Lau.
10 mayo, 2011
02 mayo, 2011
Yolanda Ynés
Hoy la niña de la familia cumple 15 años.
En medio de la felicidad y la preocupación de todos por el evento y porque nada salió como fue planificado, yo me he tomado este momentito para pensar en ella y recordarla desde cuando nació. Siempre ha sido igual de risueña, aunque la adolescencia la ha hecho un poco menos soñadora y un poco más coqueta, pero sigue siendo la misma de siempre.
Yolanda Ynés es una niña genial, muy talentosa y divertida. Un día quiere ser chef, al siguiente pastelera y al siguiente decoradora, pero da igual porque cada una de esas cosas se le da muy bien, con esa sensibilidad artística que en mi familia cercana solo le tocó generosamente a ella.
Fuerte, creativa e increíblemente parlanchina (igualita a mí :D), Yoyo es especial. Me atrevo a decir que sobresale de entre sus amigas, y no porque es la única que aún no ha desarrollado sus atributos femeninos tanto como le gustaría para su edad, sino porque es brillante en cada una de las actividades que realiza.
Fanática de Art Atack y de todos los programas de cocina que pueda ver en la tv, Yolanda es una niña lista y genuina, tanto que ni siquiera todo el maquillaje, la actitud de señorita atrevida y el nuevo look de quinceañera pueden ocultar, pues su brillo va más allá de todo, irradiado desde su hermosa alma.
Felicidades querida niña, ahora señorita, que bonito poder compartir todos estos días de fotografías y celebración contigo.
En medio de la felicidad y la preocupación de todos por el evento y porque nada salió como fue planificado, yo me he tomado este momentito para pensar en ella y recordarla desde cuando nació. Siempre ha sido igual de risueña, aunque la adolescencia la ha hecho un poco menos soñadora y un poco más coqueta, pero sigue siendo la misma de siempre.
Yolanda Ynés es una niña genial, muy talentosa y divertida. Un día quiere ser chef, al siguiente pastelera y al siguiente decoradora, pero da igual porque cada una de esas cosas se le da muy bien, con esa sensibilidad artística que en mi familia cercana solo le tocó generosamente a ella.
Fuerte, creativa e increíblemente parlanchina (igualita a mí :D), Yoyo es especial. Me atrevo a decir que sobresale de entre sus amigas, y no porque es la única que aún no ha desarrollado sus atributos femeninos tanto como le gustaría para su edad, sino porque es brillante en cada una de las actividades que realiza.
Fanática de Art Atack y de todos los programas de cocina que pueda ver en la tv, Yolanda es una niña lista y genuina, tanto que ni siquiera todo el maquillaje, la actitud de señorita atrevida y el nuevo look de quinceañera pueden ocultar, pues su brillo va más allá de todo, irradiado desde su hermosa alma.
Felicidades querida niña, ahora señorita, que bonito poder compartir todos estos días de fotografías y celebración contigo.
Etiquetas:
Texto Libre
0
comentarios
Suscribirse a:
Entradas (Atom)